domingo, 7 de septiembre de 2008

ME DUELE AMARTE

Cómo hacerle caso a mi buena amiga si me pide que te olvide y deje de lado aquello cuanto siento por ti, no es fácil... no lo es. De hacerlo dejaría de ser fiel a mi corazón, mi alma quedaría vacía... moriría sumido en mi soledad, en la pena más profunda.
Me duele amarte, sí, me duele demasiado... mas si dejara de hacerlo el dolor sería aún más insoportable; no habría, entonces, ningún motivo para vivir, se desvanecería la razón de mi existir...
En cada una de tus miradas se llevan consigo tus luceros bellos, la luz de los míos; cuando se apartan ajenos y sordos a cuanto gritan mis tristes ojos. Quisiera, en esos instantes que cegaran por siempre para que no sufrieran más, pero acaso no me dolería más dejar de ver tu linda sonrisa, no sería más lastimoso no poder percibir a través de tu oscuros ojitos tu alma clara y hermosa...
Me duele amarte, sí, me duele demasiado... mas prefiero tener un corazón maltrecho por el amor no correspondido que uno sano por no haber sentido latir alguno de amor pleno y dichoso...
Tenerte entre mis brazos besando tus suaves labios pasó de ser un bello sueño a una inverosímil utopía, que ya tengo bastante asumida. Ilusiones que se disiparon entre mis dedos como se escapa el humo del cigarro que se consume paulatinamente entre los tuyos. Anhelos por los que daría mi vida sin pensarlo, pero que canjeo por un segundo de tu presencia, por una palabra que en confianza compartes conmigo, por una deliciosa sonrisa que simpáticamente me regalas cada mañana... por tu amistad sincera...
Me duele amarte, sí, me duele demasiado... mas elijo ser el hombro que recoge tus amargas lágrimas derramadas por el desamor que lastimó tu pecho y ser la palabra de aliento que necesita tu alma que se disipa abatida en un mundo diáfano de sentimientos...
Pues más me daña el sufrimiento que llevas por dentro y socava tu ser. Te ahogas sin remisión en un mar de confusión, entre olas bravías que agitan en contraposición dos viriles vientos: uno que quiere y puede, y otro que quiere, también, pero que no se atreve a querer... Barquito a la deriva que surca aguas turbulentas en busca del luminoso faro que lo lleve a buen puerto es tu vida; la mía, suspiros de un marinero sin su querido navío que zozobra vagando por océanos de desesperanzas y olvidos...
Me duele amarte, sí, me duele demasiado... mas no dejaré de amarte, por mucho que me duela...
Como seguir los consejos de mi amiga fiel, si prefiero vivir y morir entre alegrías y quebrantos... teniéndote en mi presente como una rosa que el alba colorea en sus regazos...

Datrebil

4 comentarios:

Rara Avis dijo...

Sigue a tu corazón aunque duela, al final él sabe lo que debemos hacer, pero a veces la mente nos dicta lo contrario...

besitos grandotes...

MAR dijo...

SIENTES Y ESCRIBES PRECIOSO, ES UN PLACER REAL LEERTE.
CARIÑOS PARA TI.
MAR

Anónimo dijo...

Hola Datrebil, a veces los amigos nos aconsejan mucho y no siempre tienen la razón en lo que nos dicen aunque lo hagan de todo corazón. Yo disfrutaría de esa sonrisa que te dedica todas las mañanas, no vaya a ser que un día no la tengas y te duela más aún... Besos y que pases un bonito fin de semana. Hades

Anónimo dijo...

HOLA:
SABES YO TENGO UN AMIGO AL QUE ADORO ASI CON AMOR QUE DUELE Y TAMBIEN PREFIERO TENER SU SONRISA, SU MIRADA, SU COMPAÑIA AUNQUE SEA POR MOMENTOS CORTOS PORQUE EL MOMETNO QUE ESTOY CON EL ES COMO TOMAR UNA BOCANADA DE AIRE PARA CONTINUAR BAJO EL AGUA. ESCRIBES PADRISIMO, DIOS TE BENDIGA TIENES UN CORAZÓN HERMOSO.

LUCY